Grandes maestros de la pintura: Tiziano
Tiziano Vecellio (1488-1576) es el modelo del éxito, para los pintores de todos los tiempos Admirado por Reyes y papas, y ennoblecido por el emperador Carlos V, el más conocido de los representantes de la escuela pictórica de Venecia fue el primer pintor en alcanzar la fama y obtener en vida el mayor de los prestigios. Su larga biografía y los continuos y abundantes encargos que recibió su taller tal vez no le permitieron desarrollar plenamente su potencial artístico. Pero fue maestro indiscutible en el manejo de los colores y supo adoptar a su estilo las virtudes de sus competidores. Sólo en su larga vejez, la pintura de Tiziano se tornó más expresiva, más dramática y sombría para demostrar que su paleta era capaz de evolucionar y digna de ser admirada por artistas venideros.
El príncipe
Nicolás Maquiavelo escribió El Principe en 1522, dedicándolo a Lorenzo de Medicis, el Joven, como un tratado en el que expone los medios necesarios para acceder y conservar el poder. Con una visión renacentista y republicana, esta obra expresa con toda claridad los presupuestos a los que debe atenerse un principe para obrar con justicia y asegurarse la fidelidad de su pueblo. Esto vendría a desmentir el tan empleado término maquiavélico como sinónimo de astucia retorcida y oscura, cuando el florentino Maquiavelo expone, de manera diáfana, sugiere y ejemplariza acciones de mando y prudencia que deben regir las actuaciones del buen gobernante. En 1599 la Iglesia católica consideró esta obra como un libro maldito e impío y fue incluido en el Índice de Libros Prohibidos. No obstante, sobrevivió a siglos de oscurantismo e intolerancia y hoy esta considerada como una de las obras fundacionales de la ciencia política moderna.