Feliz norte
Esta es la historia de Aimé Billón, un hombre que se siente no sólo extranjero en cualquier parte del mundo, sino hasta en su propio cuerpo. Aunque pertenece a la tribu de los Yoruba y su abuelo era un brujo africano, su ascendencia franco-vietnamita hace que los africanos lo consideren como un hombre blanco, mientras que los blancos lo ven como un africano. Tras sus primeros treinta y ocho años de vida en Benín, decide afincarse en la lejana Noruega, donde saben mucho acerca de lo que significa ser extranjero y estar aislado. Es entre esta gente reservada, y a través de su trabajo cuidando ancianos, donde encontrará la felicidad y el camino de regreso a su verdadero hogar.
Cero K
El padre de Jeffrey Lockhart, Ross, es el inversor principal de un centro donde se lucha contra la muerte congelando los cuerpos hasta que la tecnología pueda despertarlos. Hasta ese extraño lugar viaja Jeffrey para consolar a su padre cuando va a despedirse de su esposa enferma con la esperanza de reencontrarla en el futuro. Pero cuando Ross, en perfecto estado de salud, decide acompañarla en el experimento, Jeffrey le niega su apoyo y se rebela. Una oda al lenguaje, una profunda meditación sobre la muerte y una aguda observación sobre lo que implica estar vivo.
Alguien que me cuide
12 historias ambientadas en Estados Unidos en las que ninguna ciudad en concreto cobra protagonismo, sólo personajes anónimos que habitan esa América que no aparece en las películas, la de los pueblos pequeños y anodinos donde la vida transcurre lentamente, marcada aquí y allá por sucesos en apariencia banales, pero que en realidad lo significan todo. Son parejas maduras que recuperan la ternura en medio de una crisis; golpes de suerte que trastornan existencias en lugar de mejorarlas; o recuerdos infantiles que permanecen imborrables en la memoria, resumiendo una vida o marcándola para siempre.
La casa de cadenas
«En la actualidad se está haciendo la mejor y más adulta fantasía épica. «Juego de tronos» y «Malaz: El libro de los caídos» son las sagas más importantes de este nuevo fenómeno, y son mucho más satisfactorias que la fantasía que nació al amparo de Tolkien.» The New York Times En el norte de Genabackis, tres guerreros de una tribu salvaje descienden de las montañas para atacar las tierras del sur. Para uno de esos guerreros, Karsa Orlong, ese día marca el comienzo de lo que resultará ser un destino extraordinario. Pasados unos años, Tavore, la inexperta consejera de la emperatriz, debe enfrentarse a la tarea de adiestrar a doce mil soldados y convertirlos en una fuerza capaz de desafiar a las hordas de la elegida, Sha’ik, que aguardan en el sagrado desierto. Pero la espera nunca es fácil
Rosa de fuego
Barcelona, 1937. En plena guerra civil, la ciudad resiste a los fascistas pero está desgarrada por el conflicto interno entre comunistas y anarquistas.Una joven aparece estrangulada en el piso alquilado por un famoso jugador de fútbol. Un militar franquista se infiltra entre los republicanos. Un capitán de la Guardia Civil investiga… o quizá no. Mientras tanto, el Barça –ya en el punto de mira de los golpistas- zarpa hacia México en una gira que puede salvar a los jugadores de un destino aciago, y al club de la bancarrota. Setenta años después, Pablo, un joven mexicano, y Rosa, una chica barcelonesa, intentan reconstruir aquellos sucesos para descubrir la verdad sobre sus propias familias.Una novela negra y a la vez histórica inspirada en hechos reales, en cuyo trasfondo palpitan la Barcelona metropolitana de hoy y la Rosa de Fuego, como era llamada en los años treinta, cuando todavía era la ciudad más roja de Europa.
Construyendo babel
Una nota manuscrita entre las páginas de un libro nos devuelve un recuerdo que ya creiamos olvidado definitivamente. Es así como descubrimos que quizás en nuestras bibliotecas se haya ido desplegando toda nuestra vida, a la espera de que algún día tengamos la necesidad de ir en su bus Recuperamos lecturas de infancia, juventud y madurez, y en ellas comienzan a aparecer huellas propias y ajenas. Se abre entonces el libro que, sin darnos cuenta, fuimos escribiendo mientras leíamos.
Ecos de la Guerra Civil , años de silencio y dictadura, la conquista de la Europa comunitaria , el final de los buenos tiempos, los atentados del 11 de marzo de 2004… Aunque nunca dejamos de ser el centro del relato, nuestros padres, hermanos o amigos cobran protagonismo en unos episodios y desaparecen en otros, para recordarnos que la historia de los lectores es siempre la historia de muchas personas.
La calle de la luna
Procedente de una ciudad costera, Luis lega a Madrid a comienzos de los noventa para contar el universo que se abre ante el de día, de noche, hacia fuera y hacia dentro. Todo ello envuelto en la banda sonora original de una generación que vislumbro las primeras verdades del mundo a través de la música, en una novela de aprendizaje que tiene estructura de canción pop: con su intro, melodia, estribillo y últimos acordes. Adolescencia, juventud, violencia, amistad, sexo. vacío En La calle de la Luna se descubre el talento novelístico de K. Méndez Monasterio, con una prosa dotada de ritmo y de soltura, a medio camino entre el humor ácido de Woody Allen y la melancolia de Los Secretos. Una novela redonda, capaz de sumergir al lector en una época que todavía no ha desaparecido de las calles más gastadas de Madrid
Escipión
Aníbal, hijo descarriado del historiador Brener, desperdicia su vida en los arrabales del mundillo académico, con la única compañía del alcohol y sus frustraciones. Le pesa su compromiso con la verdad opaca, al contrario que al padre, que supo construir su fama de historiador mediático sobre verdades embellecidas. Ahora el padre ha muerto, y el hijo, para hacerse cargo de la herencia, se enfrenta a un requisito endemoniado: recibirá todo lo que esperaba y mucho más, pero solo si cumple con una serie de tortuosas condiciones. ¿Ese legado es la última puñalada del padre, o es una mano tendida?
Las desventuras de Jonás plum
Desde que parte de su tierra natal como grumete, hasta que completa sus memorias en una isla ignota del Caribe, Jonás Plum concluye un periplo de disparates y calamidades nunca vistos en la literatura de aventuras. A merced de un destino cuyas claves se obstina en descifrar, afrontará las mayores dificultades de una época turbulenta con ánimo resuelto e inocente insensatez. Procurando asimilar los conocimientos científicos de su mentor Clipercuff, Jonás cabalgará a lomos de un rarísimo animal, amaestrará una galleta podrida, confraternizará con los indígenas y acabará combatiendo al servicio de la armada imperial francesa en su lucha contra Barba verde, el feroz último pirata que tiñe su pelambrera con secreciones nasales. De esta suerte de caballero andante que poco o nada tiene de épico y sí mucho de heroico nace un relato originalísimo y desternillante, escrito con una humildad dueña del doble sentido y por eso extremadamente eficaz, digno no ya de ser leído, sino releído infinidad de veces.
El faro de los libros
En El faro de los libros, Adiga nos habla de la vida en la pequeña ciudad de Kittur, entre los años 1984 (asesinato de Indira Ghandi) y 1991 (asesinato de su hijo Rajiv). Bramanes y descastados, musulmanes y cristianos pueblan sus páginas, como Xerox, un librero que fotocopia los ejemplares que va a vender y al que no le importa haber sido arrestado en 21 ocasiones porque el suyo es un oficio mejor que el de su padre, que apilaba excrementos. O Jayamma, la pequeña de ocho hijas, quien debe ponerse a trabajar porque su padre sólo tenía dinero para casar a las primeras y que acaba enganchada al pegamento y sólo se consuela con la pequeña estatua de Buda que posee. El autor sigue sorprendiéndonos, como ya lo hizo con su aclamada Tigre blanco, con un humor irreverente, al mismo tiempo que ahonda en la situación de los más desfavorecidos y en la podredumbre de un país inmenso, plural y caótico.
La travesía del vidente
Antes de que Mario Mendoza fuera Mario Mendoza existió esta recopilación de relatos con la que un joven autor colombiano buscaba abrirse paso en las letras nacionales. El libro, llamado La travesía del vidente cautivó al jurado del Premio Nacional de Literatura, que lo reconoció como lo más destacado del género en 1995. Es una alegría absoluta incorporar este libro en la Biblioteca Mario Mendoza. Algunos lo verán como la semilla insospechada de una obra que desde entonces no ha parado de asomarse al inframundo, pero lo cierto es que entre estos cuentos de mar y navegantes está muy claro lo que el autor jamás ha dejado de proponer: que el horizonte es una búsqueda infinita y trágica.
La apuesta de cielo: Serie la canción del mártir
Era un día absolutamente perfecto…
Hasta que todo se puso absoluta y perfectamente mal.
Kent Anthony es un brillante ingeniero de software ganando mucho dinero con su fenomenal carrera. Por fin esta viviendo la vida idilica, alejado de ideas de robo asesinatos y otras clases de conductas criminales horribles.
El ha dejado su pasado atrás no es lo que cree.
Ted Dekker ofrece una historia fascinante del crimen casi perfecto entretejido con un cuento de amor agridulce que casi es suficiente para salvar un alma. Una historia que lo enfrentará con un mundo escondido más real de lo que la mayoría de la gente piensa, un mundo en el que lo invisible es más poderoso que lo visible.