Darwin y el beagle (1831- 1836)
En 1831 se le ofreció a Charles Darwin, que tenía a la sazón 22 años, el puesto de naturalista a bordo del Beagle, un bergantin de diez canones que el Almirantazgo enviaba en viaje de exploración alrededor del mundo, la expedición duró cinco años y visitó Brasil, Uruguay, Argentina, Chile Perú, las islas Galápagos, Tahití, Nueva Zelanda, Australia y otros países e islas de paso.
Además de una excitante y extraordinaria aventura el largo periplo fue para Darwin el inicio de una concepción completamente nueva del origen y evolución de las distintas formas de vida de la Tierra que, unas décadas después, significaría una revolución de la mayor parte de las creencias tenidas hasta entonces por sagradas.
En esta narración vivida y colorista del viaje, se describen los países a través de los ojos de Darwin, y las numerosas especies de animales, plantas y minerales estudiados clasificados y coleccionados. Refiere la cada vez más firme convicción del Joven naturalista de que las especies no fueron creadas completas e inmutables, sino que la herencia y el medio han producido nuevas formas a partir de líneas ancestrales comunes. En contraste con el carácter e ideas de Darwin emergen la fuerte personalidad y las inamovibles creencias bíblicas de Robert FitzRoy el capitán del Beagle, tres años mayor que Darwin, pero totalmente distinto en aspecto y carácter.
El período en que se realizó la expedición fue una época dorada de la ilustración zoológica, botánica y topografica en forma de grabados en color, litografías y aguatintas. Ello ha permitido la ilustración casi completa de este libro con documentos coetáneos o casi coetáneos. En él figuran óleos y acuarelas de A Earley C. Martens, los pintores que participaron en la expedición: hay también una serie soberbia de ilustraciones iluminadas y relevantes en color y blanco y negro, de estampas y dibujos del principio del siglo XIX, que muestran los países visitados por el Beagle, los nativos y sus costumbres y los animales encontrados y observados.
El viaje del Challenger (1872-1876)
En 1872 el buque de Su Majestad Challenger salió de Posrtsmouth en un viaje que había de llevarlo a dar la vuelta al mundo, atravesando ocho veces el ecuador, hasta los hielos antárticos y a lo largo de 68.000 millas náuticas durante mil días en el mar. Era una corbeta de tres mástiles con vapor auxiliar y, junto a una tripulación de 243 hombres, transportaba un equipo de científicos al mando del profesor Wyville Thomson. El viaje del Challenger fue una expedición pionera de enorme importancia. Fue auspiciado por el gobierno británico y organizado por la Royal Society en colaboración con la Universidad de Edimburgo, en la que había nacido la ciencia de la oceanografía. El ambicioso objetivo del viaje era cartografiar las profundidades, el movimiento y el contenido de los mares, explorar los océanos en busca de organismos marinos, de pistas de fenómenos climáticos y de minerales.
Los naturalistas a bordo, Henry Moseley y John Murray, fueron observadores atonitos de la vida tanto en el mar como en tierra, y la narración y las ilustraciones de los oficiales de navío Lord George Campbell, Herbert Swire y Richard Channer proporcionan una nítida imagen de los tres años y medio pasados a bordo. Imagínese una Australia en la que Melbourne podía organizar un elegante banquete de nueve platos para los oficiales del Challenger, mientras que en el cabo York los aborígenes vivían en un estado cultural tan primitivo que su único cobijo, escribe Moseley, era una hoja de palma. En Nueva Guinea la expedición encontró la oposición de tribus de salvajes caníbales; en un Japón que empezaba a despertar hallaron todas las delicias de esta tierra sorprendente; en Hawai treparon al cráter activo del Kilauea; en Tierra de Fuego vislumbraron brevemente una raza que pronto se extinguiría,
Descubrir la naturaleza: Ecología y medio ambiente
Ante los inminentes cambios de la naturaleza que asuelan nuestro planeta, más los que ya percibimos en nuestro entorno, es urgente e imprescindible conocer las claves medioambientales que guíen nuestras actuaciones para preservar un mundo sostenible.
Egipto desde el aire
Un fotógrafo en vuelo sobre la tierra de los faraones
DESDE EL DELTA DEL NILO HASTA ABU SIMBEL Y DESDE EL MAR ROJO HASTA EL DESIERTO DEL SAHARA: UN EXTRAORDINARIO VIAJE A VISTA DE PÁJARO QUE LE PERMITIRÁ DESCUBRIR LOS MISTERIOS Y LOS COLORES DE LA TIERRA DE LOS FARAONES.
Atlas del New Age: Todos los enigmas y mundos ocultos al descubierto
Descubramos los mundos ocultos presentes en las tradiciones espirituales y místicas del mundo.
Sepamos por qué la sabiduría y las tradiciones antiguas se han convertido en la base de todas las prácticas del New Age actual.
Separados continente por continente, unos mapas ilustrados señalan el desarrollo de las prácticas del New Age a lo largo de miles de años.
Comprendamos los beneficios espirituales y los consejos prácticos de las terapias del New Age.
Una guía inestimable para descifrar los enigmas que envuelven a las tradiciones espirituales y místicas del pasado y del presente.
CABRIOLETS
La suavidad del motor que nos invade, el viento que nos despeina, el contacto directo, continuo y excitante con la caretera. Solo los Spider y los Cabriolets nos permiten acceder a un universo tan completo de emociones. Los modelos más representativos y cautivadores de los últimos noventa años de la historia del automovil. Reunidos en las páginas de este libro con las fotografías más impactantes.
Los últimos hombres primitivos: Las tribus de Nueva Guinea
En la lejana y desconocida isla de Nueva Guinea habitan los últimos hombres primitivos del planeta, seres que sobreviven en un territorio hostil y salvaje preocupándose por su alimento diario, sin saber nada de los bienes superfluos que la tecnología y la riqueza han traído a Occidente. Sumergirse en la lectura de este libro es entrar en otro mundo de culturas primitivas sorprendentes y fascinantes presentadas con fotografías de gran impacto.