Comedias de Shakespeare
Romanticismo sin dobleces, galanteos interesados, matrimonios de conveniencia, encuentros al abrigo de la noche y desencuentros a plena luz del dia. Los vodeviles de Shakespeare se representan allá donde se encuentra la verdadera comedia: entre los bastidores de nuestra realidad. Shylock con guardaespaldas, actores que improvisan sobre el escenario, un ligue peligroso en una herriko taberna. Escritores españoles y latinoamericanos de hoy nos dan sorprendentes versiones narrativas de obras de la literatura universal.
La vorágine
Vorigine está considerada como una de las obras cumbre del Modernismo sudamericano. Es una historia intensa de amor y venganza debida a la pluma de José Eustasio Rivera (Neiba, Huila, Colombia, 1888 Nueva York, 1928), creador de unos personajes apasionantes y apasionados cuyas vidas se desenvuelven en el marco de una naturaleza feroz.
Los paisajes de los llanos, las pampas y la omnipresente selva condicionan la existencia y los caracteres de los seres que aman, sufren y mal viven en un medio difícil y hostil. Publicada en 1924, su personaje central, Arturo Cova, que narra la historia en primera persona, alcanzó tal notoriedad que, a menudo, se le identificaba con el autor. José Eustasio Rivera falleció en Nueva York con apenas cuarenta años, cuando empezaba a disfrutar del reconocimiento internacional de su gran novela. Su muerte siempre estuvo rodeada de incógnitas, pero un poeta mexicano de su generación, decía, y tal vez con razón poética, desde luego, que su muerte se debía a una venganza de la selva y fue una flecha envenenada la que atravesó todo el continente y «vino a herirlo a Nueva York». Como todas las obras maestras, La Vorágine conserva hoy, al igual que cuando fue escrita, toda la fuerza, el interés y la misteriosa seducción de hombres y naturaleza trenzando un destino común e incierto.
La guerra de los mundos
la guerra de los mundos, escrita por el británico Herbert George Wells (1866-1946) y publicada en 1898 es una de las obras claves del denominado género de ciencia ficción de la primera época cuyas raíces habría que buscarlas en el francés Julio Verne, en el norteamericano Edgar Allan Poe y en el británico Oscar Wilde y hasta incluso en las obras de terror de algunos otros autores. Fue redactada cuando muchos indicios hacían suponer que Marte era un planeta habitado en extinción y contiene consideraciones psicológicas y sociológicas sobre la especie humana. Así como un mensaje pesimista sobre las posibles consecuencias del desarrollo tecnológico.
EL lazarillo de Tormes
El lazarillo de Tormes (1554 ?), junto con alguna de las Novelas Ejemplares de Cervantes y el Guzmán de Alfarache de Mateo Alemán, constituye el punto más alto de lo que podríamos llamar la «novela picaresca» española.
Lázaro, al ser apresado su padrastro, es entregado por su madre como criado a un mendigo ciego. Así comienza el desarrollo de una verdadera filosofía de vida en el aprendiz de pícaro: una pertinaz y decidida lucha contra el hambre.
Arquetipo y modelo de obras posteriores, El lazarillo de Tormes fustiga la hipocresía de la sociedad de toda una época.
Cárcel O Exilio
Del horror que recogen estas páginas he sido testigo. Militares que arriesgaron sus vidas luchando contra el terrorismo han sido condenados a prisión. Hombres y mujeres sin mancha alguna, que gracias a sus talentos, a sus capacidades profesionales y a su vocación de servicio llegaron a ocupar importantes cargos públicos, se encontraron enredados en tortuosos procesos judiciales. Algunos de ellos, advirtiendo el proposito de ser condenados injustamente, han tomado junto con sus familias el triste camino del exilio. Otros, que confiaron en demostrar su inocencia, se encontraron de pronto privados de su libertad.
Cándido y Pincesa de Babilonia
François-Marie Arouet (1694-1778), más conocido como Voltaire, filósofo y dramaturgo francés, fue un apasionado fustigador de los vicios y defectos de la raza humana, a quien satirizó con acritud desde sus obras.
Cándido o el optimismo es considerada su obra maestra, donde expone, con estilo cáustico y mordaz, la amarga lección que le había dado la vida: «Trabajar sin razonar es la única manera de hacer la vida soportable». La princesa de Babilonia, a su vez, es un ingenioso divertimento satírico en el que se burla del amor cortesano.
Cyrano de Bergerac
A fines del siglo XIX, Francia no había olvidado su vergonzosa derrota de 1870 frente a los alemanes y clamaba para que apareciera un héroe de ficción que emulara las glorias del gascón D’Artagnan y sus Tres Mosqueteros. La tarea correspondió a Edmond Rostand (1868-1918), con Cyrano de Bergerac (1897). Un nuevo espadachín y pendenciero. también gascón que puso en pie de guerra nuevamente al gallo francés basándose en un extraño y curioso personaje del siglo XVII inmerso en el mundo de la utopía, émulo de la poesía quevedesca española: Érase un hombre a una nariz pegado.
Los dos mensajes del Islam: Razón y violencia en la tradición islámica
Los dos mensajes del Islam: Razón y violencia en la tradición islámica
¿Cuáles son los verdaderos postulados del islamismo? ¿Qué caracteriza el llamado «islamismo radical»? En Los dos mensajes del Islam, Antonio Elorza nos desvela lo contrario de islamismo: el pensamiento musulmán progresista, basado en un conjunto de corrientes de pensamiento de carácter minoritario, pero de gran coherencia ideológica, que desde el primer cuarto del siglo XX cuestiona la supuesta incompatibilidad entre Islam y racionalidad occidental.
Bola de sebo
Bola de Sebo, publicada en 1880, catapultó al francés Guy de Maupassant (1850-1893) al estrellato del firmamento literario. Fue calificada de obra maestra por su maestro Flaubert. Nadie como él ha insistido en una agudísima crítica de la mediocridad burguesa hipócrita y despiadada. La novela es una de las mejores del naciente naturalismo. Al parecer se basa en hechos reales acaecidos durante la guerra franco-prusiana de 1870 y de los que sufrieron en sus carnes el acontecimiento comenzando por la generosidad y desprendimiento de la vejada protagonista.
La dama de las camelias
Si existe algún drama que se pueda definir con el calificativo de romántico, este es sin duda La dama de las camelias, debido a la pluma de Alejandro Dumas, hijo. Armand Duval, un joven burgués, de familia acomodada y conservadora, se enamora de la cortesana Marguerite Gautier que le corresponde con el más sincero y puro de los amores que ha sentido en su vida. Pero los convecionalismos sociales de la época y la tuberculosis acabarán con sus ilusiones mutuas. Llevada al cine en distintas ocasiones e inspiración de una las más bellas óperas de Verdi, esta obra se ha convertido en un clásico de los amores difíciles, con un final trágico y supuso la consagración de su autor como escritor de éxito.
La corte de los milagros
Uno de los temas históricos que más apasionaban A Ramón del Valle-Inclán (1866-1936) era el de la época de Isabel II. Tras un primer tratamiento en Farsa y licencia de la reina castiza, el escritor lo abolió en profundidad en La corte de los milagros (1927) que iba a ser el núcleo de una magna obra que había de terminar en 1898. Ante lo ingente del proyecto, sólo pudo circunscribirse al reinado de Isabel II expuesto como una especie de dioramas o ecos de sociedad de aquella época, pletórica de intrigas palaciegas, tras la primera y segunda guerra carlista, conspiraciones y súbitos cambios de gobierno en los que los generales (espadones) cobrarán un protagonismo de primer orden, así como la Iglesia con una monja su puestamente estigmatizada (Sor Patrocinio), un fraile estrambótico (el padre Fulgencio) y un obispo, futuro santo, muy influyente (el P. Claret) sin olvidar el fracaso del matrimonio regio, así como los trapicheos de las camarillas, tanto de la reina, como del rey. A señalar una importante incursión por el bandolerismo andaluz y por la creación y desarrollo de la Guardia Civil.
Lady 100% Glamour
Desde las sonadas bodas de miembros de la realeza con plebeyas, todas hemos soñado alguna vez en convertirnos en ladies, refinadas damas que no sólo encarnan los valores de nobleza y distinción, ya sea con o sin título, sino también las virtudes de la feminidad. lo que no excluye que sean un poco feministas cuando la ocación así lo requiere.